Cada riñón consta de aproximadamente un millón de unidades funcionales, denominadas nefronas. El número de nefronas se determina individualmente y depende de muchos factores. Para que el riñón funcione correctamente, es necesario mantener al menos el 30% de las nefronas en funcionamiento. Una nefrona está compuesta por el corpúsculo renal y el túbulo. El corpúsculo renal está formado por una compleja red de asas capilares denominada glomérulo y una cápsula de Bowman que lo envuelve.
Cada riñón tiene un millón de diminutas máquinas filtradoras, llamadas nefronas. Estas nefronas son como los héroes microscópicos, que trabajan incansablemente 24 horas al día, 7 días a la semana, para garantizar que tu sangre esté libre de desechos y exceso de líquidos. Puedes saber más sobre su función aquí.
El corpúsculo renal (glomérulo + cápsula de Bowman) tiene dos polos: un polo vascular y un polo tubular. Las arteriolas de la circulación renal entran y salen del glomérulo por el polo vascular. El filtrado glomerular sale de la cápsula de Bowman hacia el túbulo proximal en el polo tubular.
La filtración inicial de la orina tiene lugar en los glomérulos del riñón, en su red capilar (vaso sanguíneo). La pared de esta red capilar tiene una estructura dividida en tres capas que son las siguientes:
Células endoteliales que rellenan los capilares de los glomérulos desde el interior.
Membrana basal glomerular (MBG), estructura trilaminar compuesta principalmente de colágeno de tipo IV con laminina, heparán sulfato y entactina, así como componentes más pequeños de otras proteínas y proteoglicanos.
Epitelio, capa de células llamadas podocitos. Tienen largas prolongaciones llamadas pedicelos, de donde les viene el nombre (podo-, -cito). Cubren los capilares desde el exterior. Los pedicelos descansan sobre la membrana basal. Entre ellos hay lagunas de filtración diafragmáticas que contienen diversas proteínas.
El conjunto de filtración glomerular se compone de tres barreras celulares principales que son críticas para el proceso de ultrafiltración: el endotelio fenestrado, la membrana basal glomerular y los podocitos altamente especializados.
La MBG (Membrana Basal Glomerular) no sólo es un elemento estabilizador de la estructura de capilares y glomérulos, sino también la única capa continua y homogénea de la barrera filtrante. Su grosor cambia con la edad, en los niños es de unos 110 nm, en los adultos de 310-350 nm; en los varones es significativamente más gruesa que en las mujeres.
► La tarea general del GBM es dejar pasar selectivamente sólo ciertos componentes, como las toxinas y deshechos metabólicos de la sangre, reteniendo al mismo tiempo los componentes deseables en la circulación sanguínea.